El consumo de carne vacuna cayó un 17,6 por ciento en el primer trimestre del año frente al mismo
perdido de 2023 y se convirtió en el peor registro en los últimos 30 años, de acuerdo a lo informado por la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina
(CICCRA). Pese a la baja en el consumo, la suba de precios no se detiene. El Indec informó el
viernes pasado que los principales cortes subieron en tono al 10 por ciento durante marzo.
El relevamiento precisó que “el consumo aparente de carne vacuna habría totalizado 499,7 mil
toneladas res con hueso (tn r/c/h) en enero-marzo del corriente año”, arrojando la caída histórica en
los niveles de consumición. Asimismo, reveló que “el consumo per cápita de carne vacuna habría
sido equivalente a 42,6 kilos/año en marzo de 2024, ubicándose 18,5 por ciento por debajo del
verificado en marzo de 2023″.
El titular de CICCRA, Miguel Schiariti, expresó que el promedio de 42 kilos de carne consumidos por habitante en marzo “es un número muy bajo para lo que veníamos consumiendo” ya que “el año pasado consumimos 52 kilos de carne, es decir se cayó 10 kilos el consumo en el primer trimestre”.
En relación a la variación de precios en el contexto de alta inflación que tiene injerencia en el
descenso en el consumo, el informe aportó que en marzo, el rubro ‘carnes y derivados’ tuvo una suba
de 9,8 por ciento mensual, es decir 0,7 puntos porcentuales mayor a la de febrero, pero continuó
siendo uno de los que menores subas del registro general, dejando afuera del análisis a los
estacionales.
En el caso de los cortes vacunos el alza fue de 9,5 por ciento, mientras que en el caso del pollo llegó
a 13,1 por ciento. Las subas mensuales fueron de 11,9 por ciento para la paleta, de 10,2 por ciento
para el cuadril, de 10,1 por ciento para la carne picada común, de 9,0 por ciento para la nalga y de
6,2 por ciento para el asado. La caja de hamburguesas tuvo un alza de sólo 4,6 por ciento mensual.
En tanto, entre marzo de 2023 y marzo de 2024 en promedio el valor de los cortes vacunos subió
278,0 por ciento. Desde CICCRA indicaron que “la suba se mantuvo todavía por debajo del ritmo de
aumento de la hacienda en pie, que fue de 306,4 por ciento anual”.
Al desagregar por cortes principales surge que el precio promedio de la carne picada común se
multiplicó por cuatro en los últimos doce meses. Luego se ubicaron la paleta (287,5 por ciento), el
cuadril (271,6), la nalga (271,1) y el asado (258,4 por ciento). En el caso de las hamburguesas, el
alza fue de 276,2 por ciento anual. Y el valor del pollo registró un incremento de 287,0 por ciento
anual.
Más exportaciones
La contracara del derrumbe del consumo interno es el crecimiento de las exportaciones. La
Secretaría de Bioeconomía informó a fines del mes pasado que en febrero se exportaron 82.548
toneladas de carne vacuna, un 25,68 por ciento más que en el mismo período de 2023, mientras que
en el acumulado del primer bimestre se despacharon 160.478 toneladas, lo que implicó un
crecimiento interanual de 21,63 por ciento. Las cifras surgen de la Coordinación de Análisis Pecuario
en base a datos del Senasa, DNCCA e Indec.
“Estos números confirman una tendencia de crecimiento sostenido en las exportaciones de carne
vacuna, impulsada por un cambio de política exportadora implementado por el Gobierno nacional”,
aseguró la cartera agropecuaria.
El gobierno había habilitado a comienzos de enero la exportación de todos los cortes de carne
bovina, sean frescos, enfriados o bien congelados, tras perder vigencia las regulaciones que
oportunamente había establecido la administración de Alberto Fernández a través del decreto 911/21, que prohibía los embarques de “cortes populares”, como asado, vacío, falda, matambre, tapa
de asado, nalga y paleta, entre otros.
En 2023 se exportaron 920.000 toneladas de carne por un valor cercano a los 2700 millones de
dólares. Mario Ravettino, presidente del Consorcio de Exportadores ABC, aseguró que la habilitación
para exportar los 7 cortes que estaban prohibidos sumaría este año un 8,7 por ciento adicional.
“Podrían significar 80.000 de las 920.000 toneladas”, había anticipado.